lunes, 12 de noviembre de 2007

por bocones

hoy llegué a la conclusión de que me caen mal. me dicen más de lo que deberían, y mucho más de lo quiero saber. pareciera que quieren ganar protagonismo, o algo así, y no conformarse con hacer una presentación general. ¿es que no les alcanza con tirarle flores a los autores, y disfrutan de revelar detalles de la obra? quizá mi profesor de lengua y literatura convenció a estos señores de que es un placer contar cómo termina un libro. a mi no me gusta saberlo hasta que no leo la última página, por lo que decidí que, a partir de ahora, los prólogos quedarán, incluso, detrás del epílogo, lo que además me dará la posibilidad de coincidir o no con ellos. ustedes, señores prólogos, se lo buscaron. por bocones.


*me había olvidado: gracias por sugerirle un nombre a esto.

2 comentarios:

Henrieta R. Hipo dijo...

Mendigo prologador altanero!

malena dijo...

"Callar, callar, la gran aspiración que nadie cumple ni aún depsués de muerto", dice Javier Marías.
Y por eso tampoco hay que leer antes las críticas de cine, teatro, etc.